martes, 19 de noviembre de 2013
jueves, 14 de noviembre de 2013
Cerrar el pasado.
Hace
más de un año pero es como si el tiempo no hubiera pasado. Seguramente apenas
has cambiado, el mismo corte de pelo, el mismo abrigo, la misma forma de andar
con las manos en los bolsillos, un poco de barba quizás, pero prácticamente
nada ha cambiado.
Hace
tiempo que te he perdido la pista, hace tiempo que ya no se de tu rutina, ya no
se a que dedicas tu tiempo.
Quizás
por eso ya deje de preguntarme cosas de ti.
Llegó
un momento en el que dejé de preguntarme si te gustaría la nueva canción de ese
grupo que tanto escuchábamos. Dejé de preguntarme si sigues utilizando la misma
colonia, quizás incluso hasta olvide el olor de la fragancia aunque debo
admitir que aun recuerdo tu fragancia natural. Reconozco además que se me para
el corazón cuando huelo algo parecido.
He
dejado de pensar en tu sonrisa, en la de verdad, la sincera. Esa que te salía
conmigo y que a la vez me hacia sonreír a mi.
He
dejado de preguntarme que pensarías de mi después de todo, me hubiera gustado
saber como contabas nuestra historia, que papel he tenido en tu vida. Si alguna
vez te has arrepentido de haberme conocido o en cambio he sido lo mejor de tu
vida.
Ojala
supiera si te acuerdas de mi en algún momento o ya me has desterrado de tu
memoria.
Me
di cuenta de que para ti a lo mejor yo también era una extraña, me moría por
saber si en realidad te interesaría saber algo de mi. Pensé tantas cosas que habían
cambiado en mi vida y tu ya no sabrías.
Gracias
a ti hubo un antes y un después en mi vida.
Mi circulo de confianza se ha reducido, pero si es cierto que he
aprendido quien son mis amigos, los que están dispuestos siempre a luchar por y
junto a mi.
Reconozco
que alguna vez me he arrepentido de aquel “te quiero”, pero también creo que
necesitabas saberlo.
A
lo mejor te interese saber que estoy bien, que cuantas más cosas hago más
tiempo tengo y mis días ya no son de veinticuatro horas. Seria divertido que
supieras que mis planes se van cumpliendo y que poco a poco alcanzaré mis
sueños y encontraré mi lugar.
Es
gracioso las veces que he imaginado un encuentro casual, las veces que lo había
soñado y las ocasiones en las que ciertas cosas no deberían ocurrir.
Rápidamente
llegué a la conclusión de que no quería saber las respuestas a mis preguntas.
Empiezo
a saber lo que no quiero para dar paso a lo que si quiero.
Llega
el momento en el que das cuenta de que solo quieres dejar pasar ese tren.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)